Fredy Beras Goico, un gran dominicano.

Mucho se ha hablado sobre Fredy Beras Goico, no ha habido dominicano que de una forma u otra no haya manifestado su pesar por la muerte de este hombre, que a partir de su deceso se ha convertido en leyenda para el pueblo dominicano. Las manifestaciones han ido desde las lágrimas y agradecimientos de los más necesitados que recibieron de una manera u otra su ayuda hasta el tributo de las personalidades más encumbradas del arte y la política dominicana, Y es que por diversas razones Fredy fue un gran dominicano

Lo fue en el sentido patriótico, no hubo ocasión en que la patria lo necesitara que éste no respondiera, ya sea con sus protestas o sus propuestas. Defendió las libertades públicas con palabras y con accione, fue mediador en conflictos sociales de todo tipo y todo lo hizo sin esperar ganancias personales, además sus espacios televisivos fueron escenarios para la crítica social y el fortalecimiento de la democracia. Este hombre predicó con el ejemplo cuando motivaba a todos los dominicanos y dominicanas a honrar los símbolos patrios, todavía parece escucharlo pedir que la bandera nacional ondeara en cada puerta y en cada balcón de las casas los días de fiestas patrias. Hasta los últimos días de su vida cuando su voz ya no sonaba con la gallardía de otros tiempos clamaba por un mejor país para todos y todas.

En lo personal fue un hombre sensible, muy emotivo la línea entre la risa y el llanto fue intangible en esta persona. Su sensibilidad no se quedó en palabras, estuvo cerca del dolor humano, buscando soluciones a problemas de salud de niños, jóvenes y adultos a los que por desgracia el Estado dominicano no da soluciones. En un país donde las oportunidades son escasas muchos dan testimonio de que él le tendió la mano.

Fredy fue un hombre auténtico, siempre lució orgulloso de sus raíces y sus ancestros, sus costumbres y toda su cultura en sentido general la llevó consigo y la puso al servicio de los demás. En cuanto a sus talentos los desarrolló al máximo, creciendo cada día de su vida y ayudando a crecer a otros, fue un artista y se asumió como tal, nunca se dejó seducir por la política u otro quehacer que lo alejaran de su vocación, de sus principios y en la que tuviera que claudicar por abyección al poder,

En fin por lo dicho y otras razones Fredy vivirá en la memoria del pueblo dominicano, será recordado como uno de sus grandes hombres, y como si fuera poco su recuerdo tendrá como imagen una sonrisa.